La entretenida
Dedicatoria al conde de Lemos.
Ahora se agoste o no el jardín de mi corto ingenio, que los frutos que él ofreciere, en cualquiera sazón que sea, han de ser de V. E., a quien ofrezco el destas comedias y entremeses, no tan desabridos, a mi parecer, que no puedan dar algún gusto; y si alguna cosa llevan razonable, es que no van manoseados, ni han salido al teatro, merced a los farsantes, que, de puro discretos, no se ocupan sino en obras grandes, y de graves autores, puesto que tal vez se engañan. Don Quijote de la Mancha queda calzadas las espuelas en su segunda parte, para ir a besar los pies a V. E. Creo que llegará quejoso, porque en Tarragona le han asendereado y malparado, aunque, por sí o por no, lleva información hecha de que no es él el contenido en aquella historia, sino otro supuesto, que quiso ser él y no acertó a serlo. 37 Luego irá el gran Persiles, 38 y luego Las semanas del jardín, 39 y luego la segunda parte de La Galatea, 40 si tanta carga pueden llevar mis ancianos hombros; y luego y siempre irán las muestras del deseo que tengo de servir a V. E. como a mi verdadero señor y firme y verdadero amparo, cuya persona, &c.
Criado de V. Exc, Miguel de Cervantes Saavedra.